EDICIONES ANTERIORES DE "PROPUESTAS"

25 de febrero de 2010

Punto Cavilar: Inequidades en la Enfermedad Traumática

Por el Dr. Norberto Borba

La enfermedad traumática es una pandemia que vino para quedarse a menos que socialmente generemos los cambios en prevención, educación, fiscalización y asistencia inicial al poli traumatizado.

Desde 1982 se percibe un crecimiento sostenido de esta enfermedad que nos cuesta de 450 a 500 muertos por año y con un costo que oscila entre 927 y 1.044 millones de dólares por año, lo que representa aproximadamente el 4,5 % del PBI (el presupuesto pedido para la enseñanza).
Un país que gasta esto en esta enfermedad condena su desarrollo y compromete los recursos en salud de sus ciudadanos, como vemos es una pandemia que afecta directa o indirectamente todos los sectores sociales.
Esta situación genera inequidades en la asistencia al politraumatizado en el país ya que no lo asistimos de manera uniforme ni sistematizada y mucho menos tenemos sistemas de contralor en cuanto a la uniformidad y calidad de asistencia brindada.
La importancia de la asistencia prehospitalaria radica en que condicionamos el pronostico vital y funcional de un paciente desde el momento del evento hasta las intervenciones posteriores que se hagan en medicina en los distintos niveles de asistencia, por ejemplo no es lo mismo llevar un cerebro a una neurointervencion que ha estado con hipoxia e hipotensión el tiempo previo que el que no sufrió o el que se trató estas u otras lesiones extra cerebrales secundarias.
Pero la realidad indica que la incidencia de hipotensión e hipoxia en el TEC (Traumatismo encéfalo craneano) grave esta en el orden de un 34% en la primera y un 45% en la segunda lo que al ser corregido disminuiría de forma significativa las muertes evitables o morbilidades secuelares.
En estos años hemos pasado desde trasladar en algunos casos cientos de Km pacientes para realizar un estudio como una TAC (tomografía axial computada) hasta el desarrollo de centros que han adquirido dicha tecnología y se ha disminuido distancias y tiempos.
¿Pero,… es esto suficiente?
¿No ha llegado la hora de uniformicemos tanto la preparación de nosotros como personal de urgencias, del equipamiento mínimo básico de nuestros centros y vehículos, de las oportunidades de traslado, de la fluida comunicación con otros centros sin que se transforme en una especie de cubo mágico a ver en que cara encaja nuestro paciente, ni tampoco que quiera depositarlo en algún sitio aunque no tenga las condiciones?
Si bien existen reglamentaciones que dan el marco en que se debe funcionar todos sabemos que no llega su ejecución de igual forma en nuestro territorio lo que sigue generando inequidades en este tipo de pacientes en cuanto a su asistencia.
Es el momento de replantear de forma multiinstitucional como abordar esta compleja temática que es la 3ª causa de muerte en Uruguay y 1ª en los menores de treinta años.
Eso si, con una convicción de hacerlo de forma realizable, razonable que acceda todo el territorio, tal vez regionalizando, pautando, preparando todo el equipo asistencial con un entrenamiento que este regido por la evidencia, que tenga años de practica y que ha logrado cambiar realidades en otras latitudes.
En última instancia el personal de salud somos responsables por el avance, la mejor calidad de la asistencia de nuestros compatriotas y nosotros mismos, si queremos cambiar las realidades empecemos cambiar por nosotros mismos e impulsar el cambio de esta realidad en nuestras sociedades.
El A- B- C- D del cambio al igual que la sistematización de la asistencia al politraumatizado será:
A- Análisis de la problemática local y nacional del trauma.
B- Buenas prácticas asistenciales basadas en la evidencia, la preparación de nuestro personal de salud.
C- Conjunción de instituciones que adopten las medidas pare el desarrollo de pautas y formas de actuación que lleguen a disminuir paulatinamente las inequidades que se dan en las asistencias del trauma en nuestro país.
D- Desarrollo de sistemas y centros de trauma que permitan la articulación de los tres puntos anteriores, pero que accionen con los pilares de la prevención como lo son: a) la educación ya sea primaria, secundaria, del adulto y ciudadana.
b) la fiscalización del cumplimiento de normas de circulación.
c) la adecuación de la vía, acorde con los crecimientos del parque automotriz.
d) la legislación que funcione acorde con los puntos anteriores.
Si bien esto es un proceso a largo plazo ya hay medidas que indican el camino, es nuestra responsabilidad que no quede en un mero esfuerzo o expresión de deseos y que sepamos golpear las puertas que permitan cambiar las inequidades de hoy, estamos en el camino, va a ser dificultoso, con esfuerzo pero por cada vida que se rescate en las condiciones adecuadas este es un precio que se dispone a pagar con gusto.
El Primer Respondiente

Siguiendo e la línea del articulo de inequidades en el trauma, realidad de muchos países y no solo del nuestro, surge entonces una figura nueva para nuestro medio pero no para el mundo, el primer respondiente.

La gente en acción
Pero ¿que es el primer respondiente?, somos todos, somos los ciudadanos, la policía, el inspector, etc., que con una básica capacitación brinda la primera asistencia al siniestrado y lo de básico no es porque sea un entrenamiento leve sino es un conjunto de acciones mínimas necesarias para dar la primera asistencia y bajar las muertes evitables.
Lo cierto que en nuestro país los primeros que llegan a un siniestro es la población o la policía y muchas veces en nuestro interior no están cubiertas las rutas por lo tanto la primera asistencia se brinda como se pueda a excepción de Montevideo que tiene un convenio de asistencia con las móviles privadas, así como algunas rutas en el sur.
También este recurso humano actúa en situación de catástrofes donde los recursos normales se ven superados y es ahí donde se ve el valor de una población entrenada y planes de prevención en caso de estas situaciones.
Un ejemplo lo vimos con el incidente de las torres gemelas cuando los bomberos perecen y/o quedan atrapados la asistencia siguiente se brindo con la policía y los primeros respondientes que con la mayor celeridad se organizó una respuesta frente al desastre.

Somos todos parte de la solución
En esta línea la Unasev, MSP, ONG, Ministerio del interior, Organizaciones sociales están en un proyecto en la ciudad de Pando donde uno de los aspectos es el desarrollo de los primeros respondientes orientados a los siniestros de tránsito y a la prevención en un intento de internalizar a la comunidad con este tema.
Si este plan resulta efectivo este modelo se extendería a todo el territorio nacional, claro que queda mucho camino para recorrer y mejorar en este ambicioso plan.
Los puntos en que se entrenarían a la comunidad serian:
· Reconocer el escenario de riesgo.
· Como pedir ayuda de la forma más efectiva.
· Asistencia Básica sin maniobras invasivas.
· Movilización de pacientes de forma segura.
· Que cosas debo saber cuando alguien esta grave.
· Que no debo hacer.
· Que puedo hacer.
· Como prevenir y difundir este tema en mi entorno.
Como ven el trabajo es mucho y a largo plazo y tenemos que entender que todos somos un recurso de valor en este punto ya sea en asistencia como en difusión y/o educación.
A todos nos gustaría saber que hacer frente a un siniestro, pero mucho mejor es saber como evitarlo.
Como dice el slogan de Unasev “somos todos parte de la solución”.

No hay comentarios:

Publicar un comentario